El azulejo es un arte milenario heredado de la artesanía
musulmana que se adaptó bien en la península Ibérica
y que, a partir del siglo XV, se convirtió en un objeto esencial
de decoración y revestimiento parietal. Producido en grandes cantidades
en Sevilla y en Valencia, adonde los comerciantes portugueses lo iban a
comprar con frecuencia, pasó más tarde a ser fabricado entre
nosotros.
Después del siglo XIX, marcado por la industrialización
de su fabricación y por el recurso a padrones estereotipados y repetitivos,
el azulejo renació como soporte decorativo a través de la
recuperación que sufrió el arte contemporáneo.
Hoy en día constituye, de nuevo, un medio singular de experimentación
plástica y una alternativa válida a los soportes más
tradicionales.
Como autor de este azulejo, he dado continuidad a esta milenaria
técnica para contribuir a su renovación y actualización.
![[Assinatura]](imagens/assinatura.gif)
|